Dilemas de la era hipersónica: Desclasificación e incertidumbre planetaria (3a parte)

 Para cerrar el presente análisis y ensayo de reflexión sobre los dilemas expuestos hasta el momento retomando las publicaciones anteriores, apuntábamos que de los dilemas expuestos (carrera armamentista, desclasificación del fenómeno ovni, cris ecológica, crisis sanitaria), dejamos el espacio para abordar dos de los dilemas que son geoestratégicamente fundamentales para el control de las élites del poder mundial. El reseteo financiero y la guerra comercial y posicionamiento en el juego detallado de datos e información a través de la aparición de las llamadas criptomonedas y su posible relación con los planes barajados sobre el llamado Nuevo Orden Mundial. Este dilema se interconecta de manera peculiar con las manifestaciones que estamos presenciando en los gobiernos de las naciones, con diferentes perspectivas y atribuciones, pero a final de cuentas, todas encaminadas para redefinir y reorientar lo que podría ser el concepto de democracia generado en Occidente con la cultura grecolatina con raíces profundas sumerio babilónicas, asiáticas, etc., el hecho es que para estos tiempos de la era digital, el proceso de la democracia se ha visto alterada y hasta maniatada por intereses hegemónicos de grandes corporaciones políticas de "gobierno profundo" (deep state) a nivel internacional, mismas que están detrás de las decisiones de los que están al frente del ejecutivo y su fuerte vínculo con las demás instituciones del Estado, lo cual se ha convertido en un verdadero espacio mediático lleno de controversias, contradicciones y antagonismos.

En el caso de la supuesta guerra comercial y financiera de las regiones donde se concentra la producción del dinero como entidad abstracta, se manifiesta en circunstancias donde son los grupos y corporativos mundiales detrás de los gobiernos, los que realmente tienen la capacidad de conducir a catástrofes económicas irreparables, pero con una clara intención de manipulación y especulación detalladamente planificada para alterar a gusto y por intereses propios de las élites del poder financiero, una manifestación del acto de repercutir internamente en las estructuras de las propias organizaciones e instituciones de los gobiernos, cuyo pretexto sólo es mantener un estado de desequilibrio a propósito, de modo que esto genere enormes repercusiones en los estados de cuenta de los clientes y de las propias instituciones, a tal hecho que se pueden dar el lujo de contratar, léase con atención, hackers expertos para activar verdaderas bombas anti económicas y autodestructivas de tiempo, eso es parte de lo que quiere la élite detrás del Estado quiere mantenerse en el anonimato, y a veces se dan a conocer mediante anuncios mediáticos que simplemente ya desataron desbarajustes en los sistemas de información de las empresas, de los bancos, no importa el nivel de desequilibrio logrado, puesto que ello ya es parte del juego perpetrado para realizar daños de difícil recuperación en el corto y mediano plazo, lo que si es cierto, es que el juego de ajedrez, ruleta y dados están activados desde hace tiempo atrás, y saben de las enormes repercusiones en la sociedad y en los individuos de a pie, las reglas ya están puestas sobre la mesa, y difícilmente pueden detectarse la significación oculta del deterioro producido a nivel local, estatal, territorial y regional, el reseteo es, entonces, parte de ese macabro juego, es el futuro destino convertido en una importante herramienta biopolítica y psicopolítica de esclavitud humana.

El otro dilema que se conecta con este dilema repito, está de alguna manera vinculado y filtrado con el estado de estulticia que sigue manifestando un trastorno mental en el espectro de conciencia del Estado como de quienes lo configuran y lo retroalimentan; de quienes nos dicen gobernar en los países, cada quien a su modo y estilo, pero lo que si es cierto, es que la verdadera condena de los gobernados, es lo que repercute y altera a los grupos y corporaciones del poder como nido de serpientes que amenazan sobre la integridad de la población, porque han convertido el espacio de las políticas públicas en un mero circo mediático para ver quien adquiere mayor rating en la forma de mentir y tomar decisiones unipersonales y de grupos clasificados mediante el juego sucio de las oligarquías a través de la representación de los partidos como verdaderos bastiones ideológicos que son usados como pretexto de perpetuarse, la enfermiza legitimación y consolidación de su condición y malestar manifiestos en discursos y panfletos, en anuncios televisivos y empleando a las redes sociales para la diseminación de su virus mental de adoctrinamiento corrosivo líquido. 

Ante este embate del poder fáctico, la opción de posible es apostar porque la dimensión democrática pueda ser recuperada por las comunidades y colectivos, sin la intermediación de los agentes derivados de la partidocracia, y se arriesgue a depender de lo que posiblemente las ahora llamadas "máquinas de aprendizaje" (machine learning) y por su parte la Inteligencia Artificial (IA), sean las que en un momento dado, concentren y reorganicen las formas y concepciones de la democracia, aun cuando pueda existir en el horizonte predicciones y algoritmos que tal vez, no sean las más idóneos o sean los que puedan desatar nuevas crisis recurrentes, como lo vislumbró en su momento el futurista escritor de ciencia ficción Isaac Asimov con su novela Fundación, misma que ahora ya se podrá apreciar en una serie de televisión y en línea. La utilización de la psicohistoria en manos de la mafia encumbrada por las élites y corporativos, puede ser y convertirse en una herramienta poderosa que puede o no, repercutir en el futuro, siempre y cuando, el juego del espacio tiempo no se altere con las decisiones creadas desde la propia psiquis del imaginario inconsciente colectivo como tal vez ya se este implementando actualmente.