El Reloj Digital: Construyendo las Nuevas Narrativas Temporales (3a parte)
Las tendencias emergentes que abordan acerca de las perspectivas futuras hacia el 2030, en las cuales se identifican las posibles transformaciones de la inteligencia artificial (IA), podrían alterar aún más nuestra comprensión del tiempo y su relación directa con las formas de aprendizaje profundo y las redes neuronales que componen la estructura arquitectónica algorítmica-informática, la concepción generativa (IAG) con la que sustentan los nuevos modelos y prototipos de automatización digital, comprendidos por una interacción disruptiva en constante cambio de sus adaptaciones y modificaciones en las redes de procedimientos del lenguaje multimodal (PNL-MML), según lo visualiza en sus líneas de investigación tecnológico-educativas, Domingo Farnós (2024), de tal forma, que dichas fases de entrenamiento y aprendizaje, se convierten en el núcleo de la organización y gestión del conocimiento que se podrá construir en los centros de alta investigación informática computacional, donde se abrirá un enorme campo de probabilidades sobre los alcances que la IA va a desarrollar en las próximas décadas.
Implica, una visión de cómo estas tecnologías podrán, por sí mismas, evolucionar con su posible impacto en los procesos industriales y en las propias organizaciones corporativas (públicas, privadas); en los campos académicos y de investigación científica; en las instancias del gobierno (aspectos político-jurídicos y de gobernanza); en la modernización de la construcción de armamento letal inteligente; en la formación y entrenamiento del capital humano que se va a incorporar en el mercado dinámico acelerado de acuerdo a los requerimientos de un mundo multipolar; en los sofisticados sistemas de vigilancia, ciberespionaje táctico de inteligencia; control político y manipulación social y cultural, entre otros variados y diversos instrumentos y técnicas con los que se podrá saber y detectar, por ejemplo, a las personas de cualquier edad, sexo, condición socioeconómica, nivel de escolarización, creencias, ideología, etc.
El tiempo de los individuos y del colectivo humano, serán determinados en gran medida, por corporaciones que van a orientar el rumbo y tiempo de las naciones, la economía financiera digitalizada va a ser regida por redes de realidad virtual interconectadas a través de múltiples capas y niveles todavía superiores a las actuales versiones de prototipos IA que ya podemos visualizar en internet y en las redes sociales. La siguiente fase es integrarlas al organismo humano con capacidad para sostener los pagos digitales electrónicos, sin necesidad de cualquier tipo de tarjeta, o chip, sino mediante el uso de sofisticados nanobots líquidos incorporados en el torrente sanguíneo del cerebro, una visión distópica que nos recuerda las novelas de Neuromancer y Peripheral de William Gibson, donde existen megacorporaciones que están asociadas a estructuras de neo gobiernos profundos. Estas se encargan de incorporar sofisticados sistemas de vigilancia y espionaje virtual a través del viaje y control del tiempo entre dos siglos (XXI-XXII), nos habla de futuros alternativos conectados mediante cíborgs que sustituyen a humanos, cuyos fines e intenciones se concatenan para mantener cierto equilibrio en el mundo creado por máquinas artificiales y personalidades con serios problemas mentales de ambición y poder, o Matrix, si se antoja identificarlo igualmente de ese modo.
El hecho es contundente, sobre los acelerados cambios que estamos ya experimentando con varios posibles estallidos mundiales detonantes en varios frentes de alto riesgo: Europa, Medio Oriente y Asía que pueden, quizás, llevarnos al Punto Crucial que ya nos advertía en su libro, Fritjof Capra (1982), sobre los grandes cambios que se vienen para el planeta y para la civilización actual, si no estamos preparados para ello, será indescriptible el grado de deterioro ambiental, el incremento de la violencia e inseguridad, lo cual requieren, por lo tanto, de una visión holística profunda que pueda derivar hacia cambios graduados inteligentes, de lo contrario, el panorama prospectivo vendrá con muchos jaloneos abruptos de todo tipo.
En ese sentido, vemos como los organismos internacionales que promueven la ciencia, cultura y la educación, están sumamente preocupados y ocupados en promover y fomentar nuevos paradigmas que permitan no solo atender, equilibrar y resolver las desigualdades sociales en materia de salud, alimentación, o el derecho a una educación básica universal y desarrollo de derechos humanos fundamentales en general, siendo como hechos de gran prioridad, la necesidad de integrar propuestas viables donde la integración de la IA en la formación básica hasta niveles de formación profesional universitaria, sea el motivo central que pueda erradicar entre otros asuntos, los focos de pobreza y miseria, de abandono y aislamiento por conflictos geopolíticos, por impulsar nuevos modelos de enseñanza y aprendizaje que ya no se rijan ni se conviertan en moneda de cambio por parámetros de eficacia y eficiencia, acordes a los vaivenes de los mercados internacionales.
Si no, que existan otras opciones adaptadas a las estructuras socioculturales de los pueblos y países que requieren mejorar su fase de desarrollo de rezago y estancamiento, debido a formas de gobierno que suponen y sostienen que los efectos y las implicaciones de la Guerra Fría de fines del s. XX, deberían permanecer por siempre. Si, siempre y cuando sus cúpulas y regímenes los mantenga y legitime en perpetuidad en el poder absoluto y totalitario por los siglos de los siglos, porque siguen obcecados en ideologías sin visión ni misión concretas, siempre y cuando se mantenga su estatus de adoctrinamiento y esclavitud mental colectiva.
En ese caso, los que sí desean lograr cambios y fortalecer la democracia de sus formas de gobierno, son aquellos visionarios que quieren impulsar y promover propuestas concretas viables de integración y adaptación tecno-pedagógica en las escuelas, universidades y centros de formación para el trabajo, son aquellos pioneros valientes que ahora se enfrentan a ese estado de anquilosamiento de parte de las autoridades educativas en turno, porque no quieren y se aferran a su estatus de aparato burocrático sindicalizado y manipulado por caciques con ambiciones personales sin movimiento alguno en apariencia, porque les acomoda y gusta estar regidos por políticas educativas que se niegan al cambio y rechazan cualquier indicio de la mejora de la calidad educativa.
Es significativo, como en el caso de las universidades públicas en América Latina, todavía sobreviven a las dádivas y migajas en los presupuestos otorgados por los gobiernos en turno, ya que no les alcanza ni siquiera para tener una vida digna y de calidad en su labor académica y administrativa, ya no digamos en el caso de realización de proyectos de investigación y difusión, porque apenas es sostenible para el mediano y largo plazo, e incluso corren el riesgo inminente de cerrar sus puertas, es el caso de las universidades públicas en Argentina con el actual gobierno.
Sin embargo, observamos que, en el caso de las universidades privadas en otros países latinoamericanos, sus autoridades educativas han mostrado un interés por transformar no solo su oferta educativa en la formación profesional de sus estudiantes. También, no solo existe preocupación por estar a nivel de las grandes universidades internacionales de renombre y rating de excelencia académica, sino por el hecho de visualizar en sus proyectos académicos, la incorporación de sistematizar y automatizar sus procesos de gestión académica administrativa, y en ese nivel de solicitud, la idea de crear propuestas curriculares innovadoras de sus planes y programas de estudio, basadas y sustentadas a través de estructuras algorítmicas de IAG (inteligencia artificial generativa y redes neuronales basadas en agentes de memoria), el reto para fomentar líneas de investigación educativa con el propósito de crear ecosistemas de aprendizaje multimodal (Farnós, 2024), pueden ser parte sustantiva de un desafío importante a realizar en el mediano y largo plazo, si es que quieren sobrevivir dichas instituciones de educación superior de esta región.
Las oportunidades hacia el cambio y mejora están abiertas para quienes decidan vivir y estar en la era digital de la IA, como estrategia y táctica de las organizaciones y colectivos inteligentes. El tiempo, no es un capricho fenomenológico, ni es tampoco parte de una experiencia aislada, personal, mental o artificial, está integrada a un derecho fundamental de la presente humanidad para crear e innovar transformando nuestra realidad histórica.
Comentarios
Publicar un comentario
Se solicita que los comentarios y argumentos sobre las publicaciones de este blog sean: propositivos, reflexivos, críticos, con aportaciones pertinentes en el ámbito de la tecno-pedagogía y la educación del siglo XXI.